Bodega Freixenet tiene su origen en 1861 al ser fundada por Francesc Sala Farrés. Este negocio familiar comenzó en Casa Sala, el antecesor de la empresa Freixenet que conocemos hoy. Su primera botella etiquetada bajo la marca Freixenet se comercializó en 1910. Era un vino espumoso que acabaría siendo la insignia de la empresa y también del grupo empresarial actual.
Su éxito no tardó y en 1936 ya era el segundo vendedor de espumoso y ya disponía de unas modernas e importantes instalaciones en Sant Sadurní d´Anoia.
Si por algo es conocida esta marca es por el magnífico uso de la imagen corporativa y de la publicidad, de la que ha sido auténtico referente. De hecho, ya en la Exposición Universal de 1929 se presentó el “niño Freixenet” que acabaría siendo el símbolo de la marca. Así, en 1967 se presenta el icónico Freixenet Carta Nevada en televisión. Esta botella acabó identificando la marca y convirtiéndose en el elemento que propició el lanzamiento de la marca a nivel internacional. Después vendrían las célebres “burbujas Freixenet”.
En los 80, se apuesta por la internacionalización de la marca y el lanzamiento de productos como el Freixenet Cordón Negro. En los años siguientes se consolida la formación del Grupo Freixenet, llegando a ser el primer productor mundial de cava.