Vermut

El Vermut, vermú o vermouth es esencialmente un vino blanco macerado con ajenjo y diferentes plantas y otros componentes de sabor amargo. Su nombre procede del término alemán wermut que significa ajenjo. Y sus orígenes se remontan al siglo I A.C.

Esta tradicional bebida de aperitivo puede ser tanto de color blanco como rojo. En ambos casos, se compone fundamentalmente de vino blanco de bajo nivel alcohólico, hierbas y ajenjo. Su proceso de elaboración es diferente en cada caso pero todos parten de un vino blanco añejo, al que se le suele añadir caramelo para aportarle color y dulzor. Al resultado obtenido, se le añade una gran variedad de hierbas. Estas hierbas varían de un vermut a otro y son las que le aportan su identidad a cada tipo diferente de vermut. Tras ser filtrado, pasa por barrica en algunos casos y,  inalmente, se embotella.

Existen 4 tipos de vermut: blanco, rojo, seco y rosado.

El Vermut Rojo, también conocido como Rosso o Negro es el más habitual en España. Es también uno de los más dulces y destaca la presencia de canela entre sus componentes. En Italia, el país del que es originario, su sabor es más amargo gracias a la mayor presencia de especias.

Vermut Blanco, es el más consumido mundialmente. Se asemeja mucho al Vermut Seco pero carece de parte de las hierbas aromáticas  características del rojo, lo que le aporta un sabor menos amargo. Predominan notas avainilladas y cítricas en él.

Vermut Seco, conocido como Dry Vermut, es el ingrediente imprescindible en muchos cócteles célebres como el Dry Martini. Es el más amargo de todos y también se emplea en cocina.

Vermut Rosado, es uno de los más suaves, ligeros y frescos. Se consume especialmente en verano y es muy demandado por quienes no están acostumbrados a este tipo de bebida. 

Se sirve de forma tradicional con hielo y es habitual que vaya acompañado de alguna aceituna verde con rodajas de naranja o limón. También puede incluir un golpe de sifón para hacerlo fácil de tomar a quienes no están acostumbrados a bebidas con grados de alcohol. Al tratarse del clásico aperitivo, el maridaje perfecto para el vermut son las aceitunas y patatas fritas. También con mejillones en escabeche, sardinas, boquerones en vinagre y anchoas.